Transitando el segundo semestre del año, el Tribunal Superior de Justicia no hizo ningún ofrecimiento salarial a los paritarios Judiciales.
Con una inflación acumulada del 42,2%, el bolsillo de los trabajadores se licua mes a mes (y más aún, teniendo en cuenta que el dato de la inflación del mes de junio, se conocerá esta semana, en donde se estima superará el 7%).
La suba permanente de precios e incremento de la canasta básica afecta a todos los trabajadores, pero particularmente en el caso de los judiciales, la afectación es mayor. El judicial cuenta con un propio sistema salarial por el cual los incrementos que le corresponden se aplican al año siguiente de cuando son dictados por la Corte Suprema de Justicia. Actualmente, un sueldo de un trabajador está 4% por debajo de la inflación.
Pero el sindicato, vale aclarar, reclama la deuda del 2022, en este caso del 9%. Es decir, aún reclama deuda.
Por ello, el gremio solicitó el acortamiento de los plazos, con el objeto de que los incrementos sean aplicados antes de que la inflación los disuelva y exige que el TSJ presente una oferta formal en la próxima reunión paritaria que se efectuará el 17 de agosto.