No puede llamarnos la atención la actitud antidemocrática y autoritaria del gobernador de Jujuy Gerardo Morales que se suma a las ya demostradas por el presidente Macri y varios gobernadores e intendentes de diferentes colores políticos.
Intentado ampararse en la supuesta “defensa” del interés público pretenden cercenar derechos de los trabajadores. Cesantías, amenazas de despidos, cambios de lugares y condiciones de trabajo, actitudes persecutorias, descalificaciones a granel son moneda corriente en estos tiempos de “Cambiemos para que todo siga peor”.
En el caso de la compañera Milagro se trata de una acción articulada entre el gobierno jujeño y la rastrera justicia provincial.
En una clara actitud clasista, racista y machista intentan disciplinar a las y los trabajadores jujeños, en su gran mayoría pertenecientes a pueblos originarios, a través de la privación de la libertad de la dirigente y líder de la organización social Tupac Amaru.
No aceptan que los sectores populares sean capaces de organizarse y luchar por sus derechos. Sólo permiten la obsecuencia hacia ellos y el clientelismo que dicen combatir.
En estos momentos no se trata de discutir el modelo de organización y los lineamientos políticos llevados adelante por Milagro y la Tupac.
De lo que se trata es de repudiar el accionar del Estado jujeño que a través del gobernador Morales agrede a los trabajadores pero que no es capaz de enfrentar a los poderosos y a una justicia que una vez más demuestra su compromiso con la injusticia imperante.
Rechazamos todo intento de vulnerar los derechos de las y los trabajadores, nos solidarizamos con todas y todos los compañeros despedidos y perseguidos exigiendo la inmediata libertad de Milagro Sala.
POR LA INMEDIATA LIBERTAD DE MILAGRO SALA
POR LA REINCORPORACION DE LAS Y LOS TRABAJADORES CESANTEADOS
POR EL FIN DE LA CRIMINALIZACION DE LA PROTESTA SOCIAL
POR LA DEROGACION DE LA LEY ANTITERRORISTA
CABA, 18 de enero de 2016.-
HUGO BLASCO